domingo, 8 de mayo de 2016

Vasos llenos de charlas y algo más.

Ahí estabas tú, ese día sin tanta importancia para mi, pero para mi amiga sí. Me presentaron contigo y desde la primera sonrisa que vino de ti, supe que ibas a ser uno de mis tantos cráteres.

Fue una noche tan llena de sonrisas,bromas,coqueteos y algo de alcohol. Parecía que nos conocíamos de varios años atrás, de tan bien que nos llevamos. No necesitamos que alguien tratara de que habláramos,sólo fluyó y no paramos en toda la noche. Ya te ibas,pero antes de hacerlo; me pediste mi número con mucha pena y yo te lo dí,también apenada. 

Los días pasaron y yo te iba conociendo cada vez más;siempre me hacías reír,te burlabas dulcemente de mi,tomabas mi cabello y decías que olía tan bien,te alegrabas de verme y me abrazabas profundamente,tus ojos sonreían junto con tu boca, tu frente tenía una o dos arruguitas,tus manos a veces tomaban las mías sin pensarlo,tus ojos miraban los míos con profunda ternura, tus labios se movían a un ritmo tan ameno,tus palabras eran como hermosa música para mis oídos, tu perfume siempre tan ideal,tus pláticas siempre llenas de emoción y sabiduría. Todo me encantaba de ti, aunque tu cuerpo no pareciera perfecto; lo que había dentro de ti, era insólito.

Lo inesperado llegó,problemas a decir verdad "tuyos"...soltaste mi mano,que tan cómoda estaba junto a la tuya.

Pasaron algunos meses y volviste; como si nada hubiera pasado, hablándome como si sólo hubieran pasado unas horas desde la última vez que pude saber de ti. Volviste a habitar en mi corazón, ahora con más fuerza. Tardes junto a ti, hermosos paisajes aparecieron y con ellos, de nuevo me soltaste...pero esta vez no sólo soltaste mi mano,sino las dos manos juntas.

El tiempo trascurrió con algunos "Porqués" y otros "¿Qué hice?". Regresaste; igual que como la última vez y yo te acepté de regreso. Pero esta vez fue diferente; duró menos tu estadía en mi vida,de nuevo soltaste mis dos manos y la mitad de mi.

Mitad de año...otra vez,ahí estabas ofreciéndome tus manos y como era de esperarse, yo acepté. No sé bien cuanto tiempo duró, pero esta vez había algo en mi,que no estaba completamente convencido. Días de sospechas, tardes de investigación y noches de sentimientos absurdos,llegaron a una conclusión..."ella", sí,la que escondiste de mi tantos ayeres y que ahora su imagen estaba definida frente a mi. Tomé todas las fuerzas que tenía y te dije adiós,sin explicación me fui y no dejé que tu me buscaras.Dolió hasta lo más profundo de mi ser;mis manos se estremecieron al saber,que ya no estarían más las tuyas, mis ojos derramaron lágrimas continuamente,mi ego se hirió y mi corazón dolió.

Días...meses...sin saber de tu existencia. Mi alma me pedía que te buscara,que dejara las cosas en claro y que te entregara aquello,que me prestaste una noche fría y que aún olía a ti.Pero mi cerebro no me permitía volver a verte,volver a escribirte,volver a caer ante ti. Te busqué;aún tenías el mismo número, yo me porté lo más cortante que pude,sólo quería entregártelo e irme.

Llegó ese día y no pude evitar que todos mis sentimientos renacieran; ahí estabas,ya tenías barba, con un poco de peso de más pero permanecían esos ojos que me helaban al verlos, tu perfume era el mismo pero olía mejor. Lo imperdonable sucedió, de nuevo te acepté en mi vida pensando que ya todo era pasado. Nos volvimos tan buenos amigos; confidentes, noches de vasos llenos de verdades, secretos que hacían que tus ojos temblaran, palabras bañadas de sentimiento, comprensión, tus manos junto a las mías,silencios que eran parte de nosotros, jugueteos que cambiaban mi estado de ánimo, pláticas inolvidables,miradas cruzadas,labios tímidos, corazones palpitando, todo era tan sensacional y hermoso.

Pero hay que recordar que no todo siempre es un cielo azul, con nubes blancas y tranquilidad...ese día,esas horas,esos minutos,esos vagos recuerdos,llegaron a su fin...sí,después de casi tres años todo acabó. Aquella historia con pausas interminables, vasos infinitos, noches sin horas,mensajes secretos y tu manera de hacer que mi día cambiara...se esfumaron instantáneamente; como si nada hubiera sido importante, como si sólo hubiera sido un sueño y ya, como si fuera sólo un maniquí sin un corazón que sintiera. 

¿Recuerdas esa noche que te conocí? No...creo que ya lo haz olvidado, pero yo me acuerdo bien de aquel globo, que simulaba ser un corazón y que me lo regalaste.
¿Recuerdas cuando me contabas tus secretos y yo estaba ahí,escuchándote y dándote apoyo?.
¿Recuerdas aquellos tan cálidos abrazos?.
¿Recuerdas mis ojos mirando los tuyos?.
¿Recuerdas mi mano junto a la tuya?.
Todas son preguntas que aparecen,ahora que te haz ido y también otras tantas que jamás tendrán una respuesta. Una de las preguntas que más invade mi corazón es...¿Por qué te quedaste tanto tiempo sino ibas a permanecer en mi vida ilimitadamente?. 

Lo único que puedo decir, o a decir verdad, escribir, es que a pesar de todo; yo me visualicé contigo en un futuro(aunque lo negara), estando ahí para mi,escuchándome, recibiendo apoyo mutuo,riendo,sabiendo que tu estarías del otro del teléfono para escucharme, para desearme buenos días, para mandarme imágenes que me hicieran reír a carcajadas, haciendo cosas improvisadas, ahogando algunas de nuestras penas juntos,teniendo lindos detalles, tomando tu cara entre mis manos y mirándote a los ojos.

Sé que tu regreso es impredecible, hay quienes dicen que siempre regresa lo que menos esperas, pero...yo no sé si pueda seguir ahí para ti; cuando no hay retorno de lo que doy, cuando algún pequeño detalle se presente,tu ego aparezca y yo salga lastimada, cuando no comprendas mi situación, cuando pienses que todo está bien sólo porque sonrío, cuando tus amigos irrumpan y me dejes a un lado, cuando mis problemas te parezcan absurdos y sólo te rías, cuando me mientas en vez de ser sincero. El tiempo juntos no lo niego,fue bonito y lleno de momentos especiales, pero creo que es momento de dejarte completamente; soltar hasta el último pedacito de ti,acostumbrar mis manos a no volver a sentir las tuyas, guardar aquellos ojos que me miraban tiernamente, en una cajita de bonitos recuerdos,retener la idea de que es lo mejor, callar mis labios cuando quieran decir tu nombre,calmar mis brazos cuando quieran abrazarte, exigirles a mis dedos que no te escriban, adiestrar mis piernas para que no quieran salir a buscarte,formatear mi mente para no soñarte tanto y lo más difícil...tranquilizar mi corazón cada vez que se acuerde ti;cada vez que quiera volver a estar junto al tuyo, cada vez que quiera sentirte cerca,cada vez que sienta que te extraña.


¿Ves? No será un camino tan fácil, pero nada es imposible,tu muro es del tamaño que tu eliges. Aunque en un principio lo veas indestructible,inquebrantable, impetuoso e intimidante;todo dependerá de ti y tu lucha día a día. 
¿A  qué te enfrentarás? Sentimientos de tristeza y algunos otros,desesperación por querer verlo,ansiedad por reprimir esas ganas, frustración al no poder hacerlo,miedo a estar solo,miedo a no volver a ver a esa persona,dolores de pecho por decidir irte y no mirar de nuevo atrás, noches soñándolo y queriendo sentirlo cerca de nuevo, amaneceres con los ojos llorosos,lugares que te lo recuerdan y te ponen sentimental, canciones sobre él que llegarás a oír más de una vez y tal vez personas que te lo recuerden. Pero el tiempo es muy sabio y cuando menos te des cuenta;levantarás la mirada, mirarás hacia atrás y verás un estrecho sendero,con hermosos árboles alrededor. Tomarás un telescopio que te mostrará el principio de este sendero; el cuál era gris,casi inexistente, con miles de miedos concentrados, tú estabas casi sin vida. Pero ahora observas a donde haz llegado y te alegras de que todo aquello haya servido de experiencia, porque ahora eres aún más fuerte, sólo falta la última prueba de esta época. Enfrente de ti, está ese muro que en un principio era inmenso,pero ahora sólo es un delgado rectángulo, sólo tienes que tirarlo, con un dedo será más que suficiente.






No hay comentarios.:

Publicar un comentario